Sobre lo que ha hecho el corporativo de Disney ahora, no tengo forma de defenderlo. Es un hoyo negro, un prodigio del capitalismo, voraz y atroz
Sobre lo que inició el señor Walt, sí tengo algo bueno que decir, impuso una calidad al arte de animación muy por encima de lo que había; pero también suavizó las historias que había para niños. Así es, las suavizó. Las historias originales eran más crudas y crueles, y aún así, les gustaban a los niños
Como sea el caso, sucede de que desde que tengo memoria ha habido gente que recrimina a las películas de princesas de Disney que dan una imagen negativa a la niña. En primer lugar, el problema no está en la película, sino en cómo les enseñan los padres a ver eso a sus hijos. En segundo lugar, las historias son, de hecho, muy feministas; pero a un nivel acorde a la época en la que se escribieron
Antes, quizá todavía pero mucho menos, las familias reales no se casaban por amor, sino por deber, para poder incrementar su poderío y riqueza. El amor era puesto a un lado, y no digamos de que no importaba si te gustaba tu pareja, tenías que procrear para que el linaje siga
Esas historias, en donde un personaje digno, elegante, con honor, se enfrenta a adversidades y encuentra a su verdadero amor, quien la rescata de su destino, es una forma antigua de feminismo. Se mostraba que a pesar de todo, el verdadero amor y la felicidad están ahí, sólo hay que ser constantes y firmes ante el peligro, y no perder la fe. Recuerden que en la edad media, la fe lo era todo
Ahora nos parece tonto, claro; pero es más tonto no ubicar a los niños en el contexto de las historias. Los niños no son idiotas, los hacemos idiotas
Sin lugar a dudas, el creer que la vida de la realeza es de puro lujo y despilfarro es no entender nada. Muchas veces sacrifican sus amores, sus sueños y sus vidas por el bien de su nación. Hay monarcas que no, como en todo; pero es seguro que la vida de un rey no es fácil, y por eso terminan así los cuentos: "Y vivieron felices para siempre", porque a fin de cuentas, ante tanta responsabilidad, adversidad y desilusión, es lo que les quedaba por desear, una vida feliz para siempre
Habrá que entender el contexto de lo que vemos antes de emitir un juicio y envenenar con nuestra ignorancia a mentes jóvenes, es mejor hacerles despertar la duda y la curiosidad, así aprenderán a conocer y podrán seguir por sí solos cuando no estemos nosotros
Sobre lo que inició el señor Walt, sí tengo algo bueno que decir, impuso una calidad al arte de animación muy por encima de lo que había; pero también suavizó las historias que había para niños. Así es, las suavizó. Las historias originales eran más crudas y crueles, y aún así, les gustaban a los niños
Como sea el caso, sucede de que desde que tengo memoria ha habido gente que recrimina a las películas de princesas de Disney que dan una imagen negativa a la niña. En primer lugar, el problema no está en la película, sino en cómo les enseñan los padres a ver eso a sus hijos. En segundo lugar, las historias son, de hecho, muy feministas; pero a un nivel acorde a la época en la que se escribieron
Antes, quizá todavía pero mucho menos, las familias reales no se casaban por amor, sino por deber, para poder incrementar su poderío y riqueza. El amor era puesto a un lado, y no digamos de que no importaba si te gustaba tu pareja, tenías que procrear para que el linaje siga
Esas historias, en donde un personaje digno, elegante, con honor, se enfrenta a adversidades y encuentra a su verdadero amor, quien la rescata de su destino, es una forma antigua de feminismo. Se mostraba que a pesar de todo, el verdadero amor y la felicidad están ahí, sólo hay que ser constantes y firmes ante el peligro, y no perder la fe. Recuerden que en la edad media, la fe lo era todo
Ahora nos parece tonto, claro; pero es más tonto no ubicar a los niños en el contexto de las historias. Los niños no son idiotas, los hacemos idiotas
Sin lugar a dudas, el creer que la vida de la realeza es de puro lujo y despilfarro es no entender nada. Muchas veces sacrifican sus amores, sus sueños y sus vidas por el bien de su nación. Hay monarcas que no, como en todo; pero es seguro que la vida de un rey no es fácil, y por eso terminan así los cuentos: "Y vivieron felices para siempre", porque a fin de cuentas, ante tanta responsabilidad, adversidad y desilusión, es lo que les quedaba por desear, una vida feliz para siempre
Habrá que entender el contexto de lo que vemos antes de emitir un juicio y envenenar con nuestra ignorancia a mentes jóvenes, es mejor hacerles despertar la duda y la curiosidad, así aprenderán a conocer y podrán seguir por sí solos cuando no estemos nosotros
No hay comentarios.:
Publicar un comentario